El Barcelona se reencontrará el miércoles con un viejo conocido: Ousmane Dembélé. El francés llenó muchos titulares en su etapa como culé y la mayoría, por desgracia, vinculados con las lesiones. Vivió un auténtico calvario con las dolencias en su etapa en el Camp Nou, pero en el PSG no parece ni el mismo futbolista. Esta temporada sólo se ha perdido un par de encuentros, pero por precaución. Da la sensación que ha dejado atrás su particular vía crucis. Y, además, luce unos números espectaculares en cuanto a asistencias y en Champions se ha convertido en un jugador vital y clave para Luis Enrique.
Esta temporada en el Parque de los Príncipes, Dembélé vive una nueva realidad. Se ha alejado por completo de la enfermería. Sólo ha tenido en todo el curso unas molestias en el muslo, debidas a un encontronazo, y una pequeña distensión en la zona de los isquiotibiales, pero nada grave. Únicamente se perdió por estas dos causas los partidos contra el Estrasburgo y el Metz por pura precaución. Además de estos dos encuentros, no estuvo contra el Motpellier, aunque por un problema de oídos.
En el Barça, el Mosquito vivió una realidad completamente opuesta. Estaba llamado a marcar las diferencias, a ser un jugador clave y desequilibrante pero las lesiones marcaron su paso por el club azulgrana. En contadas ocasiones, muchas de ellas con Xavi en el banquillo, se puedo ver la mejor versión del francés. Se perdió la friolera de 119 partidos por lesión, más dos por covid.
En la temporada 17-18, su primera como azulgrana, ya entró en la enfermería en el mes de septiembre. Un duro golpe nada más arrancar su etapa en el Camp Nou. Estuvo hasta enero y volvió a caer. Se perdió 27 compromisos y fue baja 136 días. En la 18-19, la historia se repitió aunque sólo se ausentó en 13 choques. La peor fue la 19-20. Prácticamente se puede considerar una temporada en blanco tras no poder jugar en 38 ocasiones. Estuvo lesionado 333 días. Una locura.
En la 20-21 parecía que Dembélé dejaba atrás este calvario. Incluso, el jugador confesó ciertos cambios de hábitos que le ayudaron a minimizar sus dolencias. Sólo 6 encuentros de baja… pero en verano llegó el desastre. Se lesionó de gravedad con la selección en junio y estuvo K.O. hasta el 1 de noviembre. 14 partidos en el dique seco y fue volver y regresar a la enfermería. Además, la covid le dejó dos semanas de baja. En su último año como culé, se perdió 19 compromisos.
Atesora 13 asistencias
Además de minimizar al máximo las lesiones en el PSG, Dembélé también está pulverizando sus registros de asistencias. A día de hoy, atesora 13, con toda la fase decisiva de la temporada por delante. Su récord en el Barcelona eran las mismas, 13, en la campaña 21-22. Por lo tanto, si no cambia la cosa, mejorará esta estadística en su nueva etapa en el Parque de los Príncipes. En cambio, en cuanto a goles, sólo ha anotado uno.
“Ousmane Dembélé es un jugador técnicamente diría casi insuperable con las dos piernas. No sabes si sale en la izquierda o en la derecha. Yo creo que ahora, jugando por dentro, vamos a encontrar una mejor versión de él. No me preocupa que en el último golpeo esté un pelín acelerado. Lo mejorará. Es un jugador que hace muchos goles. Lo que genera, solo con sus acciones, es muy positivo para el equipo. Es un jugador imparable”, dijo hace unos días Luis Enrique del internacional galo.
La Champions, ‘su’ torneo
Si hay competición donde el técnico asturiano confía plenamente en el exculé es la Liga de Campeones. Dembélé ha sido titular en 7 de los 8 partidos que lleva disputados hasta el momento en esta competición el PSG. Sólo se perdió uno, precisamente contra el Borussia de Dortmund, por acumulación de tarjetas. Además, no sólo ha salido de inicio, también ha completado el 95 por ciento de los minutos y dio una asistencia en la eliminatoria contra la Real Sociedad.
Es un jugador imparable
Con este telón de fondo, Dembélé se reencontrará con muchos de sus compañeros y con Xavi, que fue su gran avalador en el Barcelona. El técnico siempre se deshizo en elogios hacia el francés e, incluso, logró sacar la mejor versión del internacional. No hay que olvidar que lo recuperó tras ser apartado por el club al negarse a renovar. “Puede ser el mejor jugador del mundo en su posición”, es una de las frases que ya han quedado para la historia del exmedio sobre el Mosquito.
